Bodega Las Moradas de San Martin - San Martín de Valdeiglesias, Madrid

Andres M.

Fuimos con un cupón de regalo y nos sorprendió desde el primer momento.
Monica la chica que nos hizo la visita fue un encanto explicándonos todas las curiosidades de la bodega, de la uva y de muchas cosas más. En la visita estaba incluido un paseo por los viñedos y fuimos en época de vendimia así que fue perfecto. Probamos varias uvas y vimos como era el proceso en directo.
La visita acabo con una cata al aire libre degustando quesos y jamón de muy buena calidad. Por supuesto volveremos.
En la pagina hay varias opciones de visita muy curiosas y además nos comentó que hacen degustaciones,catas y alguna cosa más en una pequeña tienda del centro de Madrid.
Muy recomendable!!!

Ignacio

No sería el mejor día por el frío y la niebla, pero ha sido sin duda la mejor experiencia que podíamos tener hoy! Gracias al amor incondicional de Mónica que radia verdadera pasión por su trabajo. Como el buen vino... esta visita es para disfrutarla con calma, en buena compañia y con todos los sentidos.
Volveré si duda a seguir aprendiendo de vuestra forma de vida y a brindar por una nueva vendimia. Salud!!

Javier R.

La MEJOR visita a bodega de mi vida. No creo que haya visitado menos de 100 bodegas, en visitas organizadas, o informales con sus dueños, algunas hasta con trenecito, pero nunca me lo he pasado tan bien como en esta visita.
Fuimos 4 amigos en un día de calor intenso, en plena vendimia de la albillo real, pero la manera que tiene Mónica de explicar las cosas hace que sea una experiencia mágica.
La bodega es pequeña, ni siquiera embotella, elabora pocos y sabrosos vinos, y el paseo por el viñedo tuvo que ser un poco más corto por el calor, y ahí es donde lo que hace Mónica lo convierte en algo inigualable y mucho mejor que cualquier visita superorganizadísima a una gran bodega.
Los vinos magníficos, nunca había probado un albillo con barrica, y los tintos fantásticos, la cata fue una maravilla.
Y un montón de explicaciones y pasión por parte de Mónica. Aprendimos mucho y a mí me deshizo alguna confusión de conceptos que tenía.
No queríamos que se acabara.
Más que recomendable, creo que es una visita OBLIGATORIA, que además da una nueva dimensión a la idea que se suele tener de los vinos de Madrid.
Gracias, Mónica, por llevarnos a través de la senda desde el inicio hasta ver las luces.

Sory A.

Mónica, eres un amor de persona y se nota que te apasiona tu trabajo, porque lo transmites. Hemos visitado muchas bodegas pero la mejor ha sido la tuya con años luz de diferencia. He descubierto el vino tinto, el buen vino tinto y me encanta.
Gracias por este rato tan agradable que nos has hecho pasar.

P.D.: Para los que venís de Madrid, si podéis salir antes de casa, porque es la carretera de los pantanos y, como en casi todas las carreteras, se forma atasco. Pero os aseguro que merece la pena pasar un poco más en el coche porque luego la recompensa es increíble.

Carmen M.

Muy recomendable para ir a hacer una visita. La bodega se encuentra en un entorno espectacular. La carretera para llegar, una vez se coge el desvío desde la carretera M501, es bastante estrecha y los últimos 700 metros para llegar a la bodega es por un camino rural. El paisaje es maravilloso, por un lado la sierra de Madrid y por el otro lado la sierra de Gredos. El recibimiento en la bodega es de 10, Mónica explica al detalle durante un paseo por una parte de las tierras , las características de la tierra, de las cepas, de la demas flora e incluso de la fauna de la zona. Una vez en las instalaciones de la bodega, nos explica el proceso de la vendimia, las barricas y todo lo demás. Finalizamos la visita con una cata de vinos + picoteo muy rico en plena naturaleza. Muy a destacar el gran conocimiento y pasión con la que Mónica nos ha realizado la visita y explicado tantas curiosidades . Y por supuesto, los vinos, muy ricos. Muchas gracias

Almudena G. T.

A pesar del día de lluvia y viento Mónica hizo una visita muy amena e ilustrativa. Como ella dice, es una bodega muy familiar, da gusto el trato recibido. Lo pasamos genial,nos sentimos muy acogidos. Mónica conoce muchísimo y lo transmite de maravilla. Los vinos son exquisitos y allí al mejor precio que puedes encontrar. La visita merece la pena para hacer y repetir en diferentes temporadas del año. Volveremos para realizar la visita nocturna degustando sus vinos bajo las estrellas.

Carlos B.

Agradecimiento

Hoy tuvimos la oportunidad de vivir una maravillosa experiencia de la mano de Monica la cual nos contagio con su entusiasmo la pasión que siente por el mundo del vino compartiendo su vasto conocimiento con nosotros de una manera diáfana y sin pretensiones pero llena de contenido información super interesante . Le felicito porque logro contagiar al grupo con el entusiasmo que se ve siente por el mundo del vino , enamorándonos e invitándonos a seguir conociendo y aprendiendo cada vez mas. Visitamos los viñedos en donde nos comento como la geografía , el clima y las variedades crean un producto maravilloso de la mano de personas apasionadas. Me encanto conocer la labor de rescate de viñedos y plantas así como el respeto por el medio ambiente entendiendo que la producción no esta reñida con la preservación del ecosistema sino que va de la mano y en armonia con la dinámica medio ambiental una filosofía interesante que suma y aporta valor agregado al producto . En la bodega pudimos aprender como se lleva a cabo el proceso de producción y la crianza en barrica para luego degustar con la orientación de monica tres de los vinos que se producen en las Moradas
encantados y plenamente satisfechos , recomendare y repetiremos en otra temporada para conocer otras facetas de la producción
excelente producto
excelente visita
excelente concepto

mil gracias

Renata

Hemos ido hoy a realizar una cata con visita a las bodegas de Las Moradas y la experiencia ha sido inmejorable. La sumiller Mónica es una gran comunicadora, que nos ha guiado por el viñedo explicando todo con sumo detalle, hemos aprendido mucho sobre el paisaje de la zona, así como sobre la historia de la bodega y su forma de producir el vino, desde la vid hasta el embotellado. La cata, acompañada con jamón y queso, ha sido muy informativa y la degustación, una delicia, gracias a la guía y explicaciones de Mónica, que no sólo conoce muy bien el producto, sino que se nota que es una enamorada del mundo de la viticultura y la enología. Los vinos, exquisitos y con una gran gama de sabores, por supuesto, hemos comprado botellas para traer a casa y hacer las delicias de nuestros invitados. Una experiencia de 10.